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Estas pautas te ayudarán a evitar quemaduras y un tono de piel desigual.
Cómo broncearse correctamente y de forma uniforme
Evite la exposición al sol durante el pico de intensidad de los rayos UV. Suele ser entre las 10.00 y las 16.00 horas. Si está al aire libre durante estas horas, intente permanecer a la sombra o utilice protección solar.
Utilice un protector solar con suficiente protección UV. Elija productos con un FPS (factor de protección solar) más alto, sobre todo si tiene la piel clara o es sensible a las quemaduras solares. Aplíquese la crema 15-30 minutos antes de salir al sol y renueve periódicamente el producto cosmético a lo largo del día.
Vístase adecuadamente. Cúbrase la piel con ropa ligera y protectora para evitar la exposición directa a los rayos UV. Un sombrero de ala ancha y unas gafas de sol también le ayudarán a proteger la cara y los ojos.
Aumente gradualmente el tiempo que pasa al sol. Empiece con sesiones cortas de bronceado y vaya aumentando el tiempo. Esto ayudará a que su piel se adapte al sol y reducirá el riesgo de quemaduras solares.
Tómese descansos periódicamente. Deje que su piel descanse de los rayos solares, especialmente durante los picos de intensidad.
Hidrate la piel. Después de tomar el sol, aplíquese loción o leche hidratante para evitar que la piel se seque y se descame.
Evite las cámaras de bronceado. Estos procedimientos pueden dañar la piel y aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de piel. Se recomienda utilizar autobronceadores u otros métodos alternativos que no impliquen rayos UV.
Proteja su piel del sobrecalentamiento. Si tiene calor, vaya a la sombra o a un lugar fresco. Evite la exposición prolongada a la luz solar directa sin descansos.
Vigile el estado de su piel. Observe atentamente cualquier cambio, como la aparición de nuevos lunares, cambios en el color o la forma de los lunares existentes, enrojecimiento o llagas. Si observa algo sospechoso, acuda a su médico para una evaluación profesional.
Ten en cuenta tu tipo de piel. Algunas personas tienen una piel más sensible y propensa a las quemaduras solares o a los daños causados por los rayos UV. Si tiene la piel clara o el pelo pelirrojo o rubio, es posible que necesite protección solar adicional y precaución al tomar el sol.
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